INDALO

   Cada pueblo tiene sus leyendas, tradiciones, costumbres y, por supuesto, sus orígenes y símbolos. En este caso, se aúnan a la perfección las dos últimas circunstancias: simbología y origen en un solo indicador común.
            Almería es conocida por muchas cualidades: sus gentes, su suelo fértil bajo ese horizonte de plástico que la ha dado en ser conocida como la “huerta de Europa”, su sol mediterráneo, etc., etc., y tiene su símbolo que es mundialmente conocido como Indalo.
            Cuando uno ve esa imagen del Indalo sabe que alguien que lo porte posiblemente es o ha estado en Almería.
            ¿Qué es ese símbolo? Su forma representa una figura humana esquematizada con los brazos en cruz y un arco saliendo de ellos que recorre por encima la cabeza. ¿Significados? Varios pero nada claro de cuál es el verdadero.
            Este símbolo apareció en una cueva llamada de los Letreros, en la zona del pueblo almeriense de Vélez-Blanco, hacia el año 1868 y desde muy pronto se convirtió en el indicador más preciso de Almería.
            Desde su aparición, también se le dotó de ser algo así como un amuleto de buena fortuna o buena suerte y así los hacían y los llevaban los almerienses de la zona norte y este de la provincia.
            Sinceramente, pienso que su nombre viene más bien del santo San  Indalecio, nombre tan común en ese lugar y que tanta devoción tiene.
            Se cuenta asimismo que hubo un movimiento intelectual y pictórico en Almería hacia la mitad del siglo pasado, que llevaba como insignia identificativa el Indalo y con ello querían reivindicar lo cosmopolita de lo almeriense y darle la importancia debida a todas aquellas culturas que desde antiguo habían estado poblando la provincia.
            Eso es algo muy común en todas estas culturas que poblaron el mediterráneo en la antigüedad, pues siempre se las ha reconocido como acogedoras de lo que venía de fuera, ya sea desde los fenicios, griegos, cartagineses, romanos o árabes.
            Se han ido quedando con lo que ellos creían que era lo mejor y lo han ido mezclando, dando lugar a lo que ahora podemos disfrutar todos: el mestizaje.
            Y eso se da también en la forma de ser de sus gentes. Así, podemos ver cómo son de acogedores, menos fríos que los que residen en zonas de interior, donde los rigores del invierno y la falta de horizonte marino los hace ser más reservados.
            Curioso es ver cómo en el templo de Ramsés II también hay dibujos que representan a figuras humanas en la misma posición que nuestro símbolo almeriense.
            Almería, una provincia donde cada pueblo que pasas, te sorprende mejor que el anterior y no te deja para nada indiferente.
            Vas con el vehículo recorriendo las carreteras secundarias por la zona del Cabo Gata-Níjar y sólo vas tú, ensimismado observando lo que estás viendo que en algunos momentos te parece monótono, sin embargo, no es así, ya que siempre hay algo que va cambiando, no sólo el paisaje, sino la forma de verlo.
            Indalo y Almería, un binomio muy difícil de separar, pues uno va adosado al otro, hagan la prueba de acercarse a esta provincia andaluza y verán como siempre hay algo que les sorprenderán.

FERNANDO SARUEL HERNÁNDEZ
Share on Google Plus

About Fernando y Tamara

This is a short description in the author block about the author. You edit it by entering text in the "Biographical Info" field in the user admin panel.
    Blogger Comment
    Facebook Comment

0 comentarios :

Publicar un comentario